Abro los ojos. Estoy tumbado en una cama y voy incorporándome poco a poco. Algo me ha golpeado en la cabeza, pero parece que alguien ha estado tratando esa herida mientras estaba inconsciente. Miro a mi alrededor, estoy en una habitación, pero algo me inquieta. Es extraña, oscura y llena de objetos… macabros.
De repente una mujer atraviesa la puerta y me pregunta por mi estado. Su aspecto desaliñado y sus ojos desmesuradamente abiertos no me dan buena espina, algo no anda bien. Cruzo varias frases con ella y confirmo mis sospechas. Esta mujer es una psicópata con la que debo tener bastante cuidado. Termina de hablar, desaparece por la puerta y nos encierra. Ha llegado el momento de la acción.
Con esta intro empieza la demo de Green Mirror, una aventura gráfica de terror al puro estilo Lovecraft en la que encarnamos a Dylan Riley, un veterano de la unidad de búsqueda y rescate del Steelrock Canyon National Park. No es el principio del juego, y el cómo hemos acabado en esa cabaña es algo que iremos descubriendo a lo largo de este pequeño bocado que nos ofrecen el trabajo desarrollado en conjunto por Lumini Studios y Bad 2 The Bone.
Como en todas las aventuras gráficas el eje central de Green Mirror se encuentra en la exploración. Para avanzar deberemos observar y recoger todos los objetos, combinarlos si fuese necesario y utilizarlos para ejercer diversas acciones sobre el entorno. En este punto he de admitir que siempre he tenido una especie de relación amor/odio con las aventuras gráficas. La razón es simple, son uno de los géneros cuya dificultad es más difícil de balancear, ya que las relaciones lógicas entre objetos tienen un matiz bastante subjetivo, y lo que puede ser lógico para algunos, a lo mejor no lo es para otros.
De hecho, la línea que separa el aburrimiento de la satisfacción es bastante fina en estas aventuras y no son pocos las frustraciones que me han causado ciertos rompecabezas cuyas soluciones he considerado improbables e injustas, solo resueltas por puro fruto del azar, incluso en grandes títulos como The Secret of Monkey Island o Day of the Tentacle.
Green Mirror juega bastante bien con esta balanza de probabilidades, la relación lógica entre los objetos entra dentro del estándar pero aun así lo bastante desafiante como para exprimirte las neuronas y repetir varias veces el mismo circuito, lo que aporta más sensación de controlabilidad dentro del juego y menos sensación de avanzar a base de pura potra.
Aplaudo el riesgo de la apuesta de esta aventura. Crear la atmósfera de un survival dentro de unas mecánicas tan poco fluidas puede llegar a ser toda una proeza. ¿Cómo crear esa sensación incómoda, tensa y asfixiante en un entorno tan poco inmersivo? Es aquí donde realmente se muestra el potencial del juego.
En algunos puntos se presentan situaciones en las que tendremos que ser bastante avispados, pues sólo tendremos un breve período de tiempo para buscar soluciones a varios rompecabezas antes de que la mujer psicópata nos haga picadillo con su motosierra. Estos rompecabezas, al tener un tiempo limitado para resolverlos son relativamente más fáciles que los anteriores, lo cual es ideal para crear esa atmósfera frenética y agobiante de los survival, así que en ese sentido, logro conseguido.
También cuenta con las clásicas respuestas múltiples en algunos diálogos. No tengo muy claro si esta relativa “autonomía” no llevará a obtener pistas, condicionara la historia o simplemente servirá como medio para profundizar más ella. Sea lo que sea siempre es un buen añadido para satisfacer tantos a los más curiosos como a los que solo buscan ir a la acción. Y hablando de acción, yo en ese aspecto sí añadiría un poco de rapidez a los movimientos del personaje, pues esa aparente calma al andar desconecta un poco del frenesí de ciertas situaciones y rompe bastante con la atmósfera inmersiva.
Green Mirror ha puesto sus cartas sobre la mesa con esta demo y no es poca cosa lo que promete. La historia es interesante (como acérrima fan de Lovecraft ya me tenía medio ganada con el tema), los rompecabezas están bien diseñados y presenta ciertas mecánicas que aportan dinamismo y frescura al género. Me ha dejado muy buenas sensaciones y es un título al que pienso seguirle la pista. Equipos de Lumini Studios y Bad 2 The Bone, os habéis ganado un “Gentlemen, you had my curiosity, now you have my attention.”