La primera vez que probé Beardy Islands fue durante la pasada Gamepolis 2016 (Málaga). Aquel entonces apenas pude ver un esbozo de lo que iba a ser el juego original, pero sí me dejó muy buen sabor de boca el juego protagonizado por este náufrago barbudo desarrollado por el equipo granadino de 8bitamin y que por fin he tenido el placer de disfrutar al 99%, sí habéis leído bien, más tarde explicaré el porqué de dicho porcentaje.
Recuerdo que lo primero que me llamó la atención fue su apartado artístico. De hecho, en su stand tenían expuestas una serie de ilustraciones en papel (frames) con las que habían elaborado las animaciones del simpático náufrago de esta aventura, todo realizado a mano siguiendo el método más puramente tradicional. Aunque no sólo la forma de elaborar la animación, sino el estilo del dibujo y la música siguen el patrón de las primeras películas de Mickey Mouse de los años 30, Popeye el Marino, Felix the Cat y todas esas series pioneras en la animación infantil que incluso los de mi generación (principios de los 90) tuvimos el placer de disfrutar de pequeños.
El juego es un clásico plataformas y puzzles desarrollado para dispositivos móviles Android, muy simple e intuitivo, con mecánicas bastante fáciles de entender y dominar. Sus niveles se presentan en forma de varios archipiélagos temáticos, no necesariamente lineales en cuanto a dificultad, y nuestro objetivo será alcanzar nuestra barca para poder escapar. Para ello tendremos que analizar y planificar muy bien nuestra estrategia en base a las siguientes mecánicas.
- Podemos andar (derecha e izquierda), saltar y trepar.
- Para poder salir de la isla tenemos que alimentarnos de 2 racimos de plátanos.
- Por cada racimo de plátano que ingerimos obtenemos más fuerza, por lo que podremos mover objetos más pesados. Pero cuidado, porque también pesaremos más y nuestros saltos serán más pequeños.
También tenemos la opción de recopilar las monedas aztecas de los niveles. Se nos exigirá una cantidad mínima entre las 10 primeras islas para poder acceder a la siguiente tanda de niveles (son un total de 40), por lo que, aunque no son necesarias para poder escapar de las islas, sí que lo serán en un futuro si queremos seguir avanzando en el juego. (Y buen aliciente para aquellos amantes de los retos que no son felices si no pueden completar su mapa al 100%).
Aunque el juego parece bastante sencillo al principio, la cosa se va complicando exponencialmente, sobre todo cuando accedemos a los niveles “nocturnos”. La visibilidad es mucho menor y aparecerán nuevos objetos como tótems de fuego, por lo que ya no sólo tendremos que lidiar con la posibilidad de quedarnos atascados, sino también con que nuestro personaje puede morir si no calculamos bien un salto o pesamos demasiado.
Beardy Islands es un juego que engaña por su relativa sencillez. Es muy fácil dejarse llevar por la emoción y jugar impulsivamente, pero a partir de cierto punto tendremos que planificar muy bien nuestra estrategia si no queremos quedarnos atascados y perder vidas tontamente. Tal fue mi caso que hasta fui incapaz de completar el último nivel, de ahí ese triste y doloroso porcentaje de finalización del juego.
Otro dato a destacar es que es completamente gratuito, así que tenéis móvil y/o tablet no tenéis excusa para no probarlo. Si algún buen samaritano consigue llegar al último nivel y completarlo le animo efusivamente a que deje su opinión en comentarios y me ilustre el camino, a pesar de poner en evidencia mi atrofiada capacidad analítica espacial. Eso sí, avisando siempre de spoiler, que nos conocemos.
Puedes descargar el juego de manera gratuita desde:
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